Las compañías pequeñas históricamente tienden a superar el rendimiento de las blue chips. Pero mientras que más y más inversores optan por el S&P 500, la burbuja de las “grandes y seguras” se hace cada vez más peligrosa.
Tenemos dos grandes índices.
Y una gran divergencia.
Por un lado, en lo que va de 2015 el S&P ha tenido un crecimiento anualizado del 8,47%.
Pero el Russell 2.000 apenas se ha movido en torno al 0%…
Observa el siguiente gráfico:
La línea superior, en azul, corresponde al S&P 500, que tiende a ser utilizado para representar el rendimiento de todo el mercado.
Y la línea roja, por su parte, es el Russell 2.000.
Comparemos ambos índices: la capitalización de mercado de la mayor compañía en el Russell 2.000 es de US$ 6.100 millones… mientras que la de la más pequeña del S&P 500 es de US$ 7.800 millones.
Como muchas veces hemos visto, las compañías pequeñas tienden a rendir mejor que las más grandes. Son más ágiles y tienen más espacio para moverse, tiene lógica.
Entonces, ¿cómo es posible esta diferencia?
Se debe a dos factores importantes: un dólar que ha estado cayendo desde elaño pasado, y la nueva reforma tributaria propuesta por Donald Trump en Estados Unidos.
Como hemos visto en otras entregas, gracias a un dólar tan débil las compañías estadounidenses que exportan a otros países les llevan la delantera a sus competidores en el resto del mundo… Y si comparas el S&P 500 con el Russell 2.000 podemos ver que todas esas multinacionales enormes tienen muchas ventaja sobre las compañías más pequeñas.
Mira cómo se ha movido el Dollar Index DXY, que compara al dólar con una canasta de 6 monedas globales, este año:
Una cotización baja del dólar se traduce en productos más baratos para los compradores internacionales. Y debido a que las ganancias de estas exportaciones se generan en euros, libras, etcétera, quiere decir que las ganancias son mayores en dólares una vez que se convierten de nuevo en dólares.
Trump y los impuestos
Por otro lado, el segundo factor en el crecimiento del S&P 500 se debe al plan de impuestos propuesto por Trump.
El Presidente tiene la intención de disminuir el impuesto corporativo a un 15% e imponer un día “libre de impuestos”, con el fin de que las compañías puedan repatriar todo el capital que tienen en otras naciones y generar grandes ganancias en el proceso.
En este mismo momento las compañías estadounidenses más grandes tienen literalmente BILLONES de dólares repartidos en el extranjero.
Por ejemplo, solo Apple tiene US$ 246,000 MILLONES acumulados fuera del país. Sólo eso ya es el PIB de varias naciones latinoamericanas.
Ese único día libre de impuestos le permitiría a las compañías traer una vez más su capital al país y con esto, beneficiar a sus accionistas. Las compañías podrían repartir dividendos especiales… o emplear ese dinero “muerto” para expandir su negocio.
Es evidente que las compañías más grandes de Estados Unidos que son parte del S&P 500 le sacarán el mayor provecho a los planes de Trump. Y he ahí la razón del crecimiento en el S&P 500.
Sin embargo, mientras las compañías más grandes disfrutan de una excelente racha, existen importantes oportunidades en el Russell 2.000…
Y resulta que las compañías de este índice han sido totalmente ignoradas.
Eso es lo que me gusta.
Como dije antes, las compañías pequeñas históricamente tienden a superar elrendimiento de las blue chips. Y mientras que más y más inversores optan por el S&P 500, las valoraciones seguirán formando una burbuja que a su vez incrementa el riesgo para esos gigantes de los que hablamos.
Por otro lado, el Russell 2.000 tiene tres catalizadores que señalan movimiento positivo en el futuro:
1. Siempre que el Russell 2.000 se estanca o liquida sus acciones, eventualmente vuelve y alcanza nuevos máximos – SIEMPRE, SIN FALTA.
2. El sector de las acciones pequeñas ofrece mucho más valor para crecer, y cuando los inversores se percaten de esto, más y más fondos irán a este sector tan atractivo.
3. Las compañías que repatrien su capital en el extranjero tomarán la oportunidad para realizar acuerdos de fusiones y adquisiciones. Esto significa que las compañías más grandes comenzarán a buscar blancos para tomas de control, principalmente las compañías más pequeñas que encontramos en el Russell 2.000.
El Russell 2.000 está listo para hacer ganancias, y con una variedad de 2.000 compañías el potencial de diversificación es espectacular.
Si quieres apostar por este índice, dale un vistazo al ETF iShares Russell 2.000 (NYSE:IWM).
Greg Guenthner
Greg Guenthner es editor de Estrategias Alpha. Sus análisis aparecen publicados en Forbes, Yahoo Finance, Bankrate y un gran número de sitios especializados.