A pesar de las trabas gubernamentales que enfrenta la legalización de la marihuana en Estados Unidos y la fuerte caída en las acciones de la industria, el potencial sigue latente.
Por Ray Blanco, desde Naples, Florida
Es hora de pasar el trago amargo.
Estados Unidos (en especial los estados federales) ha cometido un error en el proceso de legalización de la marihuana.
Lo sé, es una declaración arriesgada y que probablemente le caiga mal a más de uno.
En la actualidad, muchos me consideran el principal experto en lo que se refiere a las inversiones ligadas a la industria de la marihuana en Estados Unidos, y eso se debe a que fui uno de los pioneros en apostar por estos papeles en 2016.
Mis investigaciones y las conexiones que he establecido en la industria me han acercado al negocio de la marihuana y a los principales laboratorios involucrados en todo el mundo.
Los más importantes ejecutivos de la “industria verde” con frecuencia me llaman antes de anunciar algún hecho significativo en un comunicado de prensa.
De hecho, hace poco llegué de Nueva York, donde estuve hablando con algunos de los CEOs más importantes del sector.
Entraré en detalles –más adelante― sobre toda la información que recopilé en esas reuniones. Pero antes, como dije al comienzo, necesitamos pasar el trago amargo.
Un “mercado verde” en caída libre
Según Investopedia, un mercado bajista se define como “una condición en la que los precios de los activos (acciones de marihuana, en este caso) caen entre un 20% o más desde sus últimos máximos, esparciendo pesimismo entre los inversores, así como un sentimiento negativo en torno al mercado en cuestión”.
A la fecha, el índice que desarrollé para monitorear el comportamiento de las acciones del sector (Penny Pot Index) evidencia una caída de más de 22% para estas acciones, como puedes observar en el gráfico a continuación.
Se espera que entre los próximos cinco y diez años, entre el 75% y 90% de todas las empresas vinculadas al negocio de marihuana fracasen.
Y ya estamos presenciando el comienzo de este declive en California.
Muchas de las empresas de cultivo de cannabis en California se enfrentan al declive y su posible extinción.
El blog financiero Zero Hedge reportó que más de 10.000 empresas de cultivo podrían cerrar sus negocios pronto. Y eso no incluye a los productores auxiliares, como los fabricantes de productos comestibles y también los dispensarios.
Se podría decir que los productores corren un riesgo mayor de cerrar sus negocios que las firmas que cultivan. El presidente emérito de Harbourside en Oakland, Steve DeAngelo, señaló a GreenState.com que prevé un “extinción del 75% de los jugadores en la industria”.
La culpa es de los federales
El gobierno federal de Estados Unidos ha cometido un grave error al no apoyar esta creciente y floreciente industria en el país.
El negocio del cannabis se presenta al mejor estilo del Lejano Oeste: constantemente está restablecimiento sus políticas debido a que nadie se ha tomado el tiempo para elaborar un plan de manera correcta, como sí lo ha hecho Canadá.
Sin un marco regulatorio estándar del gobierno federal que establezca una base de controles, balances y regulaciones, cada estado del país va en una dirección distinta. Y ese es un comportamiento un tanto egoísta.
Cualquier estado nacional estaría encantado con la idea de que su propio marco legal para el negocio del cannabis fuese la referencia para un modelo a escala federal.
En realidad, existen pocos incentivos para que los estados trabajen juntos en este momento.
Y esto trae consecuencias no deseadas que perjudican el mercado legal de marihuana en Estados Unidos.
Tomemos, por ejemplo, el reporte de julio de 2018 sobre los problemas de corrupción de California. En este podemos observar que “el nuevo elemento criminal de la marihuana viene a buscar recompensas vestido de traje”.
Veamos algunos ejemplos:
• El “Apothecarium” en San Francisco: el dispensario demandó a la ciudad, alegando corrupción pública, en vista de que se le negó una licencia frente a un competidor que tenía conexiones e hizo una serie de contribuciones a campañas políticas, según SF Weekly.
• El Daily Californian informó en junio de 2017 que el jefe de la Comisión de cannabis medicinal de Berkeley, Dan Rush, fue declarado culpable de fraude y lavado de dinero en asociación con licencias de cannabis.
• En Huntington Park, solicitantes de dispensario presentaron una demanda en la Corte Federal de Justicia, alegando que los administradores de la ciudad conspiraron para otorgar licencias a determinadas empresas, de acuerdo con los documentos judiciales obtenidos por Tech Profits Daily.
Sería ingenuo pensar que California es el único estado del país que enfrenta este tipo de corrupción.
De hecho, hace unos días supimos que el alcalde de Fall River (Massachusetts), Jasiel Correia, de 27 años, ha estado conspirando para obtener dinero de varias operaciones legales de marihuana.
Esto, junto con las nuevas preocupaciones médicas y la falta de previsión para adelantarse a estos problemas con la regulación federal, significa una sola cosa:
El sentimiento del mercado en torno a las “acciones verdes” se encuentra en su nivel más bajo de la historia. Y veremos caídas más pronunciadas para muchos de estos papeles en el corto plazo.
¿Y las buenas noticias?
Aunque parezca difícil de creer, las hay.
La dinámica de “extinción” esperada para el sector y la profundización de la tendencia bajista es exactamente el escenario ideal para los inversores en este momento.
Esto se debe a dos razones específicas.
La primera es que, mientras más oleadas de ventas experimenten las acciones del sector, mayores serán los descuentos a los que podrás acceder como inversor. La segunda razón es un poco más complicada.
Hoy queremos mostrarte un nuevo gráfico denominado “Hipérbole del Ciclo de Gartner”.
Se trata de una representación gráfica de un patrón común que surge con cada nueva tecnología, innovación o industria. El ciclo ―en lo que respecta a la marihuana― es el siguiente:
En este momento los papeles ligados a la industria del cannabis se encuentran en un punto intermedio entre el máximo de las expectativas infladas (Peak of Inflated Expectations) y la meseta de productividad (Plateau of Productivity)
Si esta hipérbole te resulta familiar es porque esta misma dinámica se ha dado en el pasado. Un ejemplo claro es la burbuja tecnológica que tuvo lugar desde 1994 hasta el año 2000.
Las expectativas salvajes llevaron a un aumento meteórico para muchas acciones tecnológicas en aquel entonces. Pero gran parte de la hipérbole fue exagerada. La burbuja tecnológica estalló y el sector cayó en una depresión desilusionante. Solo unas pocas empresas sobrevivieron. Por cada Amazon, había dos Pets.com más (una empresa que no sobrevivió al estallido de la burbuja).
A pesar de la fuerte caída que registran las acciones de marihuana, creemos que puede haber un cambio en la tendencia a largo plazo.
Las empresas con fundamentos débiles se beneficiaron en el pasado a costas de las empresas de calidad en el sector.
Es hora de que el sentimiento negativo comience a decantar la industria y sobrevivan los jugadores con verdadero potencial.
Todo lo que necesitas para tener éxito invirtiendo en las acciones del negocio verde es diferenciar al próximo Amazon de los fraudes como Pets.com.
Yo estaré a tu lado para guiarte en el proceso.
Pronto compartiré novedades importantes sobre las oportunidades del sector y te explicaré cómo aprovecharlas.
Ray Blanco