Sí, las criptomonedas están en medio de una burbuja espectacular. Pero no dejes que esa palabra te asuste, porque las oportunidades con el “universo cripto” no irán a ninguna parte.
Por Felipe Ramirez
En estos días, semanas y meses por venir, se construirán riquezas verdaderamente enormes.
Las posibilidades son inmensas. Piensa en el mercado en 1928 antes del crack o, más cerca en el tiempo, en internet a mediados de los 90.
Mucha gente se hizo totalmente rica antes de que explotara esa burbuja.
El otro día leí algo gracioso. Que algún día no muy lejano, “A.C.” significará “antes de criptos”, y “D.C.” será “después de criptos”.
Y que en este momento estaríamos viviendo los últimos tiempos de “A.C.”
En definitiva, la idea es que es hora de prepararse, porque el mundo está a punto de cambiar.
Las criptomonedas y la evolución del dinero
Al principio todo giraba alrededor de lo que se podía cazar y recolectar.
Si alguien lograba cazar un jabalí, existía la posibilidad de cambiar la mitad de su carne por un montón de manzanas.
Te podías hacer un buen cerdo agridulce con ello.
Luego vinieron la tierra y los recursos que alguien podía generar en un terreno determinado, como los granos y la harina, en lo que sería agregar valor al “commodity”. Esto introdujo nuevo factor a la ecuación, como es el valor de la tierra y la propiedad en torno a ella.
Para facilitar los intercambios, se sumaron los metales. Oro, plata, cobre, principalmente.
De ahí salieron las primeras monedas. Si querías transportar mucho dinero tenías que llevar una bolsa. Y mucho cuidado.
Y siglos pasaron hasta que vino el papel moneda. Primero de forma privada, emitidas sobre todo por bancos, y luego de forma “pública”, a través de un monopolio centralizado por el Estado.
Por un lado hizo todo más sencillo, pero al mismo tiempo cargó muchas transacciones de trabas e impuestos.
Y el con dinero electrónico, como las transferencias bancarias o las tarjeta de crédito, no tienes un ápice de privacidad.
Finalmente, ahora tenemos las criptomonedas. No hay problemas de transporte, no hay impuestos en las transacciones, no hay humanos en medio de las transacciones, y son anónimas.
El dinero va mutando hacia ser un contenedor de valor en una forma que sea fácil de transportar, más seguro y más privado.
Por supuesto, está el tema de la confianza. Yo sé que 100 dólares o euros valen eso y que más o menos va a seguir valiendo lo mismo en el futuro. Con las criptomonedas no tengo esta certeza
Ahora, ¿es tan así? Procesos inflacionarios como los de Argentina no son algo que esté tan lejos de las posibilidades de cualquier país del planeta. Hemos visto la intervención que los bancos centrales de Estados Unidos o Europa llevaron adelante durante la última década.
Ahora, la parte mala…
Con el bitcoin, por ejemplo, una lista de transacciones en forma de “bloque” se envía a la red interconectada (no centralizada). En ese momento los mineros, que de a poco van creando bitcoins hasta llegar a un máximo de 21 millones, validan la transacción.
Problema número 1: Si una transacción no llega a un bloque (en bitcoin), entonces tiene que esperar un cierto período de tiempo antes de poder entrar en el próximo bloque. Esto podría significar que tomaría más tiempo llevar a cabo el proceso, y explica la demora en la aprobación de ciertos pagos.
Problema número 2: todos pueden “ver” la transacción en el llamado “blockchain”. No pueden ver quién la ejecuta, pero sí su tamaño y otros detalles.
Ahora, si bien esos problemas pueden ser eliminados, hasta que eso ocurra muchas divisas virtuales corren un enorme riesgo, y pueden generar monedas sobrevaluadas, como hemos visto a lo largo de este año, con apreciaciones superiores al 4.000% en algunos casos.
En pocas palabras, las condiciones para una situación de burbuja perfecta.
Sobrevivir a la explosión (y ganar con ella)
No estoy diciendo nada nuevo al decir que la incertidumbre crea volatilidad. Y en este escenario, las criptomonedas van a ser volátiles por un tiempo.
La otra cara del riesgo es que la la volatilidad crear grandes oportunidades, porque tiene la particular cualidad de hacer fluctuar diariamente y de gran forma los valores intrínsecos de las cosas.
En ese sentido, si alguien logra identificar las criptomonedas que de verdad valen la pena, podrías hacerte de mucho dinero jugando en el escenario actual, más allá de las ganancias de corto plazo.
La verdad es que llegado a este punto yo mismo comienzo a entrar en una nebulosa. Mi fuerte con las tendencias macro, por eso me siento más cómodo en el análisis fundamental.
Afortunadamente tengo a un equipo detrás.
Y es en este momento cuando alguien como Louis Basenese entra en acción…
Su solución es simple: investigar, diversificar y construir una red de inteligencia que nos permita ayudarte a comprender todas las situaciones relevantes y tomar decisiones inteligentes para tus ahorros, no sólo en el caso de las criptomonedas sino que en las inversiones en general.
En este caso, la evolución del dinero y la de todas las industrias señalan con mucha fuerza a que las divisas virtuales serán parte de nuestro futuro, y la forma con a través de la cual pasaremos de estar “aquí” a “allá” estará repleta de oportunidades muy lucrativas.
Nosotros estamos acá para para alejarte de las monedas falsas y la mala información, con el fin de entregarte oportunidades para generar dinero que sean totalmente reales antes, durante y después de que la burbuja reviente.
Muchos salieron muy perjudicados de burbujas similares, como ocurrió con el boom de las empresas puntocom en los 90s, y nuestro objetivo es que no te pase lo mismo.
Saludos,
Felipe.